Tan solo un recuerdo de la Fiesta que hoy celebramos en toda la Iglesia y que debiera acompañarnos a avanzar en este tiempo de Esperanza y Compromiso que es el Adviento.
No voy a recordar la vida de San Francisco Javier porque seguro que la mayoría la conocéis con todo tipo de detalles o la podéis consultar en la web. Quiero recordar a este Santo como Patrono de todos los Misioneros. Así se le ha reconocido a San Francisco Javier y así hoy lo queremos celebrar.
Y me parece interesante que en este Adviento nos preguntemos por nuestro ser Misioneros. Al menos todos los bautizados. Misioneros no son únicamente los que dejan su tierra para irse a países lejanos a presentar el Mensaje de Jesús, aunque San Francisco Javier sea un ejemplo de ello.
Todos debemos presentar el Mensaje de Jesús allá donde nos encontramos. Todos somos Misioneros. No es necesario marcharse lejos para ser Misionero. Difícilmente se puede ser Misionero en lugares lejanos si no somos capaces de hacerlo con quienes nos rodean, con los de casa.
Os invito a que celebremos esta jornada festiva, pero también que nos preguntemos si estamos siendo Misioneros con quienes nos rodean, en nuestro pueblo o en nuestro ambiente. ¿Somos Buena Noticia para los más cercanos? ¿Estamos anunciando con entusiasmo que llega la Navidad, la llegada de Dios a cada casa? ¿Estamos anunciando que la justicia está por encima de otros intereses? ¿Somos defensores a ultranza de la verdad por encima del engaño? ¿Apostamos por los pobres para hacer un mundo mejor? ¿Negamos toda violencia? ¿Anunciamos la paz como algo a alcanzar y mimar?....
Esto es ser Misionero hoy y aquí y creo que es la mejor manera de celebrar hoy esta Fiesta del Patrono de todos los Misioneros.
Que ustedes lo disfruten.
